En el siglo XX y principios del XXI, la presencia de la mujer es cada vez más notoria: empresarias, enólogas, bodegueras, viticultoras, investigadoras, escritoras, etc, comenzaron a interesarse en el tema del vino.
Las primeras excepciones ocurrieron de manera fortuita, como, por ejemplo, la muerte del marido o la llegada de una herencia inevitable. Pero en el siglo XX y principios del XXI, la presencia de la mujer es cada vez más notoria: empresarias, enólogas, bodegueras, viticultoras, investigadoras, escritoras, sommeliers y educadoras. En fin: no hay campo en el que no sobresalgan y no estén presentes.
Bodeguera. Al identificar aquellas mujeres que pusieron la primera piedra, el nombre de Madame Clicquot —conocida después como Viuda de Clicquot— encabeza la larga lista.
Transcurrían los primeros años del siglo XIX cuando, con tan solo 27 años, Madame Clicquot tuvo que hacerse cargo de un próspero negocio de champán debido a la muerte de su esposo por la fiebre tifoidea. Mujer perfeccionista, le molestaba que los espumosos lucieran siempre turbios. Ordenó poner la botella bocabajo para que los sedimentos descendieran y se aglutinaran en la boca del envase. Paso seguido pidió enfriarlos hasta el punto de congelación. De esa manera y tras retirar el tapón provisional de la botella, el taco salió expulsado por presión y el resto del líquido quedó limpio y transparente. Así introdujo la técnica del degüelle o dégorgement, todavía vigente.
Empresaria. En 1988, tras la muerte del barón Philippe de Rothschild, miembro de una dinastía bancaria y fundador de la casa Château Mouton Rothschild, Philippine Mathilde Camille, su única hija, heredó la célebre bodega en momentos difíciles para la vitivinicultura francesa. Bajo su dirección, la casa Moutoun Rothschild aumentó la participación de la legendaria marca en el mercado mundial y duplicó las ventas hasta dejar las finanzas en estado saludable. La baronesa Philippine murió en agosto de 2014.
Enóloga. Susana Balbo desafió en Argentina una larga tradición de machismo en las salas de elaboración de vinos. Fue así como se convirtió en la primera mujer en obtener el título de enóloga profesional (cum laude), abriéndose paso como creadora y asesora en distintas empresas, hasta crear Dominio del Plata, su propia bodega. Con la marca Susana Balbo Wines, lanzó reconocidas etiquetas como Críos, Susana Balbo, Nosotros y BenMarco. En el área gremial, asumió en tres distintos períodos la presidencia de Wines of Argentina. La revista Drink Business la eligió como una de las 50 mujeres más influyentes en el mundo del vino. Tras un corto período como diputada nacional, ha pasado a dirigir el grupo W20, enfocado en el empoderamiento de las mujeres mediante iniciativas de inclusión.
Escritora. La inglesa Jancis Robinson ha sido catalogada en numerosas ocasiones como la Reina de los Escritores de Vinos. Como crítica, ha expuesto el criterio de que la mujer aprecia el vino por lo que es y no por lo que pretende ser, o sea, por la imagen petulante de los puntajes. Estudió matemáticas y filosofía en la Universidad de Oxford. Luego estudió en el Wine & Spirit Education Trust y posteriormente se tituló como Master of Wine. Fue la primera periodista y escritora en obtener ese título. Es autora de más de 17 libros, entre ellos el Atlas mundial del vino (junto con el escritor inglés Hugh Johnson) y es la editora del Oxford Companion to Wine, manual obligatorio de estudio para los expertos. Escribe la columna de vinos del Financial Times y dirige el portal www.jancisrobinson.com.
Reconozco en Susana y Jancis su rol de inspiradoras, consejeras y alimentadoras personales de mi vocación por el vino. Han estado ahí cuando las he necesitado.
https://www.elespectador.com/cromos/gastronomia/grandes-mujeres-del-vino-articulo-860107