No es cierto que haya sido la metodología del DANE la causante del bajo recaudo de impuestos de las bebidas alcohólicas como manifiestan los gobernadores.
La reducción del recaudo se debe principalmente a que la Ley 1816 de 2016 al incrementar excesivamente el impuesto al consumo de esas bebidas, indujo un cambio en la composición del mercado. Mientras las categorías de gama media y alta por pagar más impuesto decrecen, la categoría de gama baja ganó participación por pagar menos impuesto, incluso por debajo del pagado bajo la ley anterior.
Adicional al desplazamiento del consumidor a alternativas menos costosas, el recaudo se ve afectado por el aumento del contrabando, que según el último estudio de Euromonitor International sobre el mercado ilegal de bebidas alcohólicas en Colombia, dejó pérdidas el año pasado por US$150 millones para el Estado y US$271 millones para la industria.
Así, queda claro que a pesar del alza en los impuestos, el recaudo puede continuar bajando, incrementando el contrabando y la adulteración; y la razón no es la metodología aplicada por el DANE, entidad que hizo los correctivos en 2017 para ajustarla a la realidad del mercado contemplando todos los actores de la cadena y apegándose a la ley; sino el aumento excesivo del impuesto.